APRENDAMOS A TENER CONVERSACIONES DIFICILES EN EL TRABAJO
En el día a día en nuestras oficinas, tanto con nuestros compañeros, subalternos e incluso clientes, proveedores y similares; nos enfrentamos a conversaciones que nos son agradables pero si muy necesarias. En Treball te queremos ofrecer algunos tips para que puedas preparar esta conversación
- Prepárate adecuadamente: Antes de la conversación, reflexiona sobre el problema, identifica tus objetivos y piensa en posibles soluciones. Ten en cuenta diferentes perspectivas y prepárate para escuchar.
- Escoge el momento y el lugar adecuado: Busca un entorno tranquilo y un momento en el que ambas partes estén disponibles y no estén bajo presión. Evita discutir en público, ya que esto puede aumentar la tensión.
- Mantén la calma: Controla tus emociones y mantén la calma durante la conversación. La ira o la frustración pueden obstaculizar una comunicación efectiva.
- Escucha activamente: Presta atención a lo que la otra persona está diciendo. Haz preguntas para clarificar y muestra empatía hacia sus sentimientos y perspectivas.
- Comunica claramente: Expresa tus pensamientos de manera clara y directa, evitando el lenguaje acusador. Utiliza declaraciones «yo» en lugar de «tú» para evitar que la otra persona se sienta atacada.
- Focaliza en el problema, no en la persona: En lugar de criticar a la persona, enfócate en el problema específico y busca soluciones conjuntas. Esto ayuda a evitar que la conversación se vuelva personal.
- Busca soluciones, no culpas: En lugar de asignar culpabilidades, colabora en la búsqueda de soluciones. Esto puede incluir compromisos o cambios en el comportamiento de ambas partes.
- Usa ejemplos concretos: Ilustra tus puntos con ejemplos específicos para que la otra persona pueda entender mejor tu perspectiva.
- Mantén un lenguaje positivo: Utiliza un lenguaje positivo y constructivo. En lugar de enfocarte en lo negativo, destaca las oportunidades para mejorar la situación.
- Sé flexible: Está abierto a compromisos y soluciones que beneficien a ambas partes. La flexibilidad es clave para resolver conflictos de manera efectiva.
- Hacer un seguimiento: Después de la conversación, asegúrate de hacer un seguimiento para evaluar si las soluciones propuestas están funcionando y si es necesario realizar ajustes.